Con el pie izquierdo, así empezó la “nueva era” de Los Angeles Lakers en la NBA. Una muestra de ello es que no ganaron ni un partido en la pretemporada, y en su segundo juego de la campaña regular volvieron a caer. Además, Anthony Davis y Dwight Howard, dos de sus pesos pesados, casi se van a las manos.

En la derrota por 115-105 contra los Phoenix Suns, Anthony Davis y Dwight Howard intercambiaron algo más que palabras en el banquillo del Staples Center. Davis se dirigió hacia Howard, quien estaba sentado, y lo encaró.

Cuando este último se levantó de su asiento, Davis lo agarró del brazo y lo empujó. Sus compañeros tuvieron que separarlos en un tiempo muerto, previo al final del segundo cuarto, cuando el marcador iba 34-18 a favor de los Suns. 

“Lo resolvimos ahí, y ahí se quedó. Es mi hermano y mi compañero. Estamos bien. Ya lo solucionamos. No quiero que nadie lo convierta en un problema”, declaró Howard a los medios de comunicación, tras finalizar el compromiso.

El jugador de 35 años de edad reiteró: “Tuvimos unas diferencias sobre algunas cosas que sucedieron en la cancha. Los dos tenemos una gran pasión por ganar. Somos adultos. Estas cosas pasan. Eso ya está resuelto”.

Davis, por su parte, aseguró que no tiene rencores hacia Howard. “Dos muchachos apasionados y con ganas de ganar, eso es todo”, dijo el ala-pívot, para restar importancia al momento de tensión.

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